La Gomphrena pulcella, o "Siempre viva del campo" es mi preferida, es una herbácea de 50 cm. de altura que forman una mata densa de color rosa, espectacular para formar borduras, son de pleno sol, muy resistentes a las sequías y soportan suelos muy pobres, requieren poquísimo mantenimiento. su floración empieza con los primeros calores hasta entrado el otoño.Sirve como flor de corte, y si las dejamos secar boca abajo pueden duran casi hasta la siguiente floración sin perder el color.
Cuando estudiaba arquitectura en Córboba, todos los inviernos le llevaba un ramito a mi entrañable amiga Beatriz.
La Ipomoea purpúrea, o campanita, tiene sus grandes detractores, pero cuando forman una masa llena de flores azules, rosas, tan simples pero tan hermosas son imposibles de no admirar. Crecen por todos los alambrados de los campos. Este verano, le hice un tutor con cañas para que se trepe, creció tanto que le tuve que poner refuerzos constantemente. Sus flores fueron la compañía de cada amanecer.
Una "infiltrada", color blanco en medio de la misma planta.
Esta es la "Ipomoea rubriflora", menos común , más pequeña y muy florífera, de un color entre el rojo y el naranja muy bonito.
Esta variedad "escarapela", asomaba del lote del vecino, hermosa!!
Las "Zinnias peruviana",o flores de papel son tan resistentes al calor!!, florecieron a pesar de los 40°C, sin problemas!
Y el pasto ilusión!!!